viernes, 28 de octubre de 2011

Desde el 1 de Julio

Y nos quedan mil lunas llenas por delante. Da igual si son abrazados, besándonos, mirándonos fijamente con esos ojos verdes o simplemente en silencio, el uno junto al otro. Pero nadie nos las va a quitar.


martes, 18 de octubre de 2011

Empezar de cero.

Todo olvidado, o eso dices. "Si tu lo olvidas yo lo olvido". Sabes perfectamente que la primera que quiere olvidar todo soy yo, que soy yo la que quiero olvidar tantas cagadas. La duda que me queda es si de verdad lo vas a olvidar... Espero que si. Pero tengo miedo. Vale, me parece perfecto, empezamos de cero. Empezamos otra vez con esas conversaciones tímidas, empezamos otra vez a coger confianza, a tener ganas de hablar el uno con el otro, a vernos y sonreír, empezamos otra vez a ser amigos, pero seré yo la que empiece otra vez a ilusionarse. Sí, tengo miedo. Tengo miedo de perderte otra vez. Porque se que ésta vez debo ir con más cuidado, se que debo cuidar cada palabra que digo, cada gesto, cada mirada... Porque se que te puedo perder más fácil de lo que se pierde una pestaña que se te ha caído, la sujetas con la yema de tu dedo y cuando te quieres dar cuenta, se ha volado. No puedes pedir el deseo. Se ha volado. Te has volado. De eso tengo miedo.

jueves, 6 de octubre de 2011

Aquel 1 de julio.

Esa sensación que tienes cuando ves que todo lo que más quieres se esta yendo a la mierda, poco a poco...
Sí, eso que más quieres, esos recuerdos imborrables, todo, empezando por ese 1 de julio. 
Ese día. Puede que uno de los que más me han marcado. Uno de julio. Tumbados, los dos solos, en la hierva, mirándonos, miradas tímidas, que ese día parecían no tener ninguna importancia, pero lo que yo daría ahora por repetir esas simples miradas... 
Silencios, no sabíamos que decir, ganas de huir, de irnos lejos por miedo a cagarla, de marcharnos y no volver, pero a la vez no querer estar en otro sitio que no fuera ese.
Y lo que daría yo por estar como ese día, por que me vuelvas a mirar con esos ojos verdes, por ver tu sonrisa una vez más, por verte nervioso cuando me hablas, por ver esa sonrisa tonta que te salía cuando me veías, porque te enfades cuando no te salude... Cosas que en su día parecían insignificantes, no les di importancia, y ahora es lo que más hecho de menos.